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FOCUS
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F O C U S
En Frederique Constant, donde se apuesta
por los valores seguros, el año 2025 viene
marcado por el regreso de dos exitosas
creaciones, el calendario perpetuo para
hombre y el manchette para mujer.
QP en masculino
Desde hace casi veinte años, Frederique Constant
cuenta con su propia manufactura en Plan-les-Ouates,
en el cantón de Ginebra. En unas instalaciones inaugura-
das en 2006 y ampliadas en 2019, la firma diseña, fabrica
y ensambla los movimientos mecánicos exclusivos de
la colección denominada simplemente Manufacture. El
calibre FC-776 con calendario perpetuo, el 34º, es una
evolución del FC-775, que causó sensación en su lan-
zamiento en 2016.
El calendario perpetuo, que tiene en cuenta la dis-
tinta duración de los meses, incluido febrero en los años
bisiestos, pertenece tradicionalmente al grupo de gran-
des complicaciones, conocidas por su complejidad y alto
coste. Hace apenas una década, lanzar un calendario
perpetuo por menos de 10.000 euros se consideraba
prácticamente imposible. Frederique Constant lo logró
partiendo desde cero. Aprovechó los avances tecnológi-
cos para desarrollar una construcción más sencilla, con
componentes más fáciles de producir y ensamblar. Tras
dos años de I+D, pudo lanzar el Manufacture Quantième
Perpétuel en acero con movimiento automático, con una
frecuencia de 28.800 alternancias/hora, reserva de mar-
cha de 38 horas, por tan solo 8.400 euros.
A diferencia del enfoque habitual, los diseñadores de
Frederique Constant comenzaron por diseñar la esfera,
adaptando después el movimiento. Este planteamiento
permitió cuidar el diseño y crear una estética equilibrada,
con indicadores colocados en posiciones óptimas y una
fase lunar de mayor tamaño de lo habitual. El ajuste
es sencillo, mediante pulsadores planos situados en la
carrura: a las 10h para la fecha, a las 8h para el día de la
semana, a las 11h para los meses y el año bisiesto, y a
las 5h para la fase lunar.
Hoy, el nuevo Manufacture Quantième Perpétuel se
presenta en una caja de 40 mm de diámetro, en lugar de
los anteriores 42 mm, un formato vintage muy apreciado
actualmente. Con líneas suavizadas y asas estilizadas,
luce una esfera en tono salmón sutilmente rediseñada:
índices más finos, minutería tipo “ferrocarril” en el borde,
indicadores bien estructurados y un acabado soleado
que aporta un toque sofisticado. En cuanto al movi-
miento, el calibre FC-776, que sucede al FC-775, incor-
pora una reserva de marcha de 3 días, gracias a un nuevo
barrilete desarrollado en 2024 para los calibres FC-706
Manufacture Classic Date y FC-716 Manufacture Classic
Moonphase Date. A pesar de sus mejoras tanto estéti-
cas como técnicas, el nuevo Manufacture Quantième
Perpétuel 2025 sigue manteniéndose por debajo de
los 10.000 euros. Frederique Constant se mantiene fiel
a su principio de accesibilidad.
Manchette en femenino
Más pulsera-reloj que reloj-pulsera, el manche-
tte regresa con fuerza al panorama relojero. Como en
los años 80, cuando estuvo muy de moda, se trata de
un reloj femenino por excelencia, una pieza joya que
muestra la hora como función secundaria, un acceso-
rio de moda que se presta a múltiples variaciones de
estilo, en especial al actual juego de superposiciones.
En Frederique Constant, donde el manchette apareció
por primera vez a comienzos de los años 2000, ahora
vuelve con un aire glam rock.
El nuevo Classics Manchette se reconoce por su bra-
zalete de acero con decoración inspirada en el motivo
“clous de Paris”, un patrón guilloché tradicional en relo-
jería. Los eslabones cuadrados, rematados con pirámides
de vértice plano, se disponen en filas de siete para formar
una pulsera de gran flexibilidad. Las superficies cepilla-
das de las pirámides suavizan el brillo del acero pulido,
que rodea una pequeña esfera disponible en cuatro ver-
siones. La más relojera, en blanco y negro, es la única que
muestra horas y minutos con cifras, en este caso roma-
nas. La más joyera está engastada con 158 diamantes,
mientras que las más vintage, que nos remontan a los
años 60, están realizadas en piedras duras. Se puede ele-
gir entre la intensidad negra del ónix o el verde jaspeado
de la malaquita, apreciadas tanto por su aire retro como
por su carga simbólica. Los Classics Manchette funcionan
con un movimiento de cuarzo FC-200, con 60 meses de
autonomía, es decir, 5 años completos. Estas novedades
vienen a enriquecer aún más la ya variada oferta feme-
nina de Frederique Constant. ■ Marie Le Berre
1. FREDERIQUE CONSTANT Classic Perpetual Calendar Manu-
facture. El reloj con calendario perpetuo de Frederique Constant
regresa en una caja de acero de 40 mm. Muestra sus funciones
con agujas plateadas y índices aplicados, sobre una esfera sal-
món con acabado soleil. El nuevo calibre Manufacture FC-776,
que exhibe acabados clásicos (perlage y Côtes de Genève) a través
del fondo transparente, ofrece una reserva de marcha de 3 días.
2. FREDERIQUE CONSTANT Classics Manchette. En su regreso,
el Classics Manchette se presenta en cuatro modelos diferencia-
dos por sus esferas. La esfera negra, sencilla con dos agujas, es
de ónix, una piedra dura que evoca los años 60. En la manchette,
las pirámides tipo clavos de París están cepilladas en superficie
y pulidas alrededor. Movimiento de cuarzo.
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